Siempre listos… a pesar de…

El 12 de junio pasado un tornado acabó con Little Sioux Scout Ranch, un sitio de campamento Scout en Iowa, USA; dejó varios heridos… y 4 muchachos muertos. Apenas tenían entre 13 y 14 años.

Si los Scouts no hubieran estado preparados, el número de víctimas habría sido mayor: previamente habían recibido formación acerca de cómo reaccionar ante un tornado.  Constantemente estaban pendientes de los informativos del clima (que al verse tan malo, los obligó a quedarse en el campo) … Además, antes de que sonara la sirena de alerta, los chicos ya se habían puesto a cubierto. Uno de ellos contó que estaban por ver una película cuando alguien avisó que se acercaba un tornado. En ese momento todos se pusieron a buen resguardo. De pronto se oyó un ruido fortísimo, como un jet volando a ras de tierra… y al cabo de un rato, desapareció después de haber causado muchos destrozos.

Pasado el fenómeno, los chicos vencieron sus temores y salieron a rescatar a otros accidentados: contaban con botiquines y curaron las heridas de varios heridos de cortes y golpes.  Y sobre todo, contaban con el conocimiento de cómo hacer bien las cosas, y el Espíritu Scout de enfrentar valerosamente la situación, buscando servir a los demás.