En mis épocas de Guía Intermedia – equivalente a Scout – sólo pude ir a un Jamboree Nacional: al de Huaraz, no como participante (era un Jamboree = para Tropas de SCOUTS, no compañías de GUIAS), sino como apoyo del equipo de montaje: ayudé a colocar la señalización de las diversas calles del evento, entre otras tareas.
Ya más adelante, como dirigente, estuve en el Equipo de Servicio de diversos Jamborees nacionales, regionales y mundiales. Y una sola vez he ido acompañando a una patrulla. A pesar de estar acostumbrada a la independencia de trabajar en el Equipo de Servicio, fue toda una experiencia vivir con las chicas el Jamboree “de cerca”. Una de las lecciones más importantes fue acercarlas a otros scouts, pues ellas estaban acostumbradas a su patrulla, a su grupo, y no se animaban a interactuar con los demás; la otra gran lección fue la de lanzarse sin miedo a los retos diversos, comenzando por el miedo al ridículo: Cuando vieron la pista de comando, se desanimaron de participar (¿mencioné que sólo contaba con un par de chicas aguerridas?). Entonces usando unas témperas de los colores de su pañoleta, les pinté en las mejillas el número de su grupo. “Ay qué roche!” “Por qué tenemos que pintarnos?”…. Les contesté “porque vamos a ganar!”. No sé cómo, pero la motivación funcionó: las chicas se pusieron las pilas, gritaron como descosidas, se arrastraron hasta tener las pestañas color polvo…. y al final vencieron.
Cuando culminó el Jamboree Mundial UK 2007, los suecos nos invitaron a su país para el próximo evento, cuyo lema sería “Simply Scouting” – Sencillamente Escultismo… slogan muy tentador, después de haber vivido una experiencia tan sofisticada (y a veces hasta metalizada) en Hylands Park. Desde entonces Stefan (mi esposo) y yo ya teníamos muchas ganas de ir allá.
Pasó el tiempo, nuestra familia creció (tenemos una “media seisena”), y los cuidados que demandaba nuestro lobato más pequeñito me impidieron llevar a cabo una tarea que me había propuesto en Inglaterra: Reabrir mi grupo, el legendario San Isidro 51. No pude ser Akela de nuestro hijo mayor, a quien inscribimos en la manada de su colegio…. pero para no despegarnos del movimiento, los papis formamos parte del Comité de Grupo.
Bueno. Ha pasado el tiempo, y de pronto ya estamos en vísperas de Suecia 2011. Desde hace algunos meses estuve conversando con amigos del Facebook a ver si estaban interesados en ir con sus chicos…. Pero aunque muchos habían oído del evento, nadie sabía si el Perú enviaría una delegación. Por fin Carlos Guerrero (de San Borja 209) me preguntó si acaso yo conocía chicos que quisieran ir. Entonces fui a consultar a un par de grupos…
¿Y qué encontré? Dirigentes que no sabían nada del evento y por otro, dirigentes que – sabiendo del mismo – no tenían interés alguno en hacer esfuerzos para llevar a chicos.
Para colmo, también pregunté si asistirían al Jamboree de nuestro Centenario, a realizarse en diciembre 2011 en la Univ. Agraria (aquí en Lima)…. y en lugar de entusiasmarse con la noticia , o por lo menos de asombrarse (si es que no sabían de ella) me salen con respuestas como: “… mmm….no sé…. habría que ver… la plata… quién podría ir….. mmm…..”
Todas estas respuestas me dejaron un sabor amargo. Si yo hubiera tenido dirigentes así, tengan por seguro que no estaría escribiendo este Blog!
¿Cómo es posible que en plena era del internet, en que las comunicaciones vuelan en cuestión de segundos, en que los chicos pueden chatear en tiempo real con alguien del otro extremo del mundo…. cómo es posible que haya dirigentes que no sepan de los próximos eventos? Claro. No me refiero a los diversos jamborees nacionales de los otros países, hablo del jamboree MUNDIAL, del cual ya se sabe hace casi 4 años. Y hablo de NUESTRO Jamboree NACIONAL, conmemorando los 100 años del Escultismo en el Perú. ¿Cómo me salen con una respuesta tan vaga como: “… mm… no sé… habría que ver… no hay plata….”
He compartido con mi esposo mi decepción de estas entrevistas, y luego con Carlos Guerrero y Raúl Sánchez (quien sería nombrado Jefe de la Delegación Perú a Suecia, ). Y todos hemos llegado a esta conclusión: Estamos indignados de encontrar a dirigentes que por no incomodarse , prefieren callar y no motivar a sus chicos a participar en este tipo de encuentros. ¿Por qué digo que se incomodan? Porque los chicos no pueden asistir solos, sino que necesitan ser acompañados por sus jefes…. esto significa no sólo un costo para el jefe, sino también tiempo y esfuerzos para ir consiguiendo dinero para los chicos mismos. O en otros casos puede significarles renunciar a otros intereses (como su fiesta/campamento de año nuevo con los amigos de universidad).
¡Qué actitud egoísta! No se han dado cuenta de que un chico tiene prácticamente UNA SOLA OPORTUNIDAD de asistir como PARTICIPANTE en un Jamboree Mundial. Porque si deben tener entre 14 y 17, y el próximo Jamboree Mundial es cuatro años más tarde, entonces ya se les habrá pasado la chance de asistir como miembros de una patrulla.
¿A qué Scout no le gusta irse de campamento? Los Jamborees deberían ser el sueño de todo scout. B-P quiso que se realizaran con frecuencia, porque contribuían a crear ese espíritu de hermandad tan necesario en nuestro mundo. Podré sonarles cursi, pero yo estoy convencida de que en un evento de este tipo, los chicos aprenden a convivir con gentes de otras razas, de otros credos, de otras costumbres… y aprenden a respetarse y a trabajar y a divertirse UNIDOS. ¿No es esto la mejor garantía para evitar las guerras que tanto daño hacen a la humanidad?
Ciertamente ir a un Jamboree no es barato. Pero cuántas veces los grupos se han organizado haciendo diversas actividades para así poder mandar a sus chicos. En verdad: todo se puede cuando hay voluntad.
Ojalá los dirigentes tengan más voluntad para estas cosas… Al fin y al cabo, el movimiento es para los chicos, no? Un Jamboree es también parte importante de ser scout… y parte importante de su formación como ciudadano del mundo.